te he visto sentarte a esperar la muerte
sin preguntar nada,
te he visto recoger los trocitos rotos
en destrozos de otras personas
sin preguntar nada,
te he visto vestirte para una ocasión
que tu misma desconoces
sin preguntar nada,
admirar de espaldas
una belleza intangible
sin preguntar nada,
llorar, por razones totalmente triviales
y no soltar ni una lagrima
por embates de la vida,
y todo esto
absolutamente todo esto
lo haces mecánicamente
cual persona que anda sin vivir en si
sin mostrar un mínimo ápice de querer
y sin preguntar nada,
y ahora te pregunto:
cuantas preguntas tuviste que ver truncadas
cuantos "no" y cabeza gacha,
cuantos sentimientos aplastados
por sueños de la guerra interna,
cuantas vidas a tus espaldas
y muertes calmadas entre caladas,
recuerdos que se mustian y se apagan,
cuantas veces tuviste que callar
tus propias palabras
para tras tanto tiempo,
no querer preguntar nada.
te quiero tanto
que me paro, te miro.
tranquila,
no preguntare nada.
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